Hay algo en Elden Ring: Nightreign que se siente… hueco. Como si From Software hubiese extraído los sistemas más funcionales de su juego más exitoso y los hubiese reempaquetado en una experiencia que, aunque eficiente, carece de alma. Este no es el juego que yo quería de ellos y eso no lo hace necesariamente malo pero definitivamente no es lo que busca en sus títulos. Siento que Nightrein es una muestra acelerada y gamificada de los aspectos menos interesantes de la fórmula Souls: el meta, el minmaxeo, el build perfecto. Un Souls destilado, simplificado y enfocado exclusivamente en la optimización y la acción rápida. Para quienes venimos a los juegos del estudio presidido por Hidetaka Miyazaki por algo más que el combate, este resultado es una cierta decepción.
Nightreign propone una estructura roguelike cooperativa donde uno o tres jugadores se lanzan en expediciones por ciertas zonas del mapa de Elden Ring, derrotando enemigos y sub jefes aleatorios hasta que cae la noche y se enfrentan a un jefe que también es al azar. Si sobreviven dos noches, al tercer día toca enfrentar al jefe final de esa expedición que sí está predefinido de antemano. Es una premisa funcional en papel, pero que en la práctica resulta caótica, torpe y carente del diseño meticuloso que caracteriza a From.
Porque en los Souls tradicionales, todo tiene un propósito. Cada centímetro del mapa, cada enemigo escondido, cada atajo tiene su razón de ser. Nightreign, en cambio, se siente generado por algoritmos. No hay algo artesanal en la disposición de los enemigos ni en la arquitectura del entorno. La interfaz, con un aire a juego gacha de celulares, tampoco ayuda. La experiencia resulta fría, matemática. El matchmaking terminó siendo un proceso frustrante y costaba encontrar partidas pero eso no será la experiencia del resto de los jugadores que van a tener una base de usuarios mucho más grande. Si jugás solo, olvidate: durante las primeras horas es prácticamente imposible avanzar sin frustración y recién con mejores runas equipadas vas a poder sobrevivir algún que otro día pero no mucho más; el juego no está pensado ni balanceado para ser jugado de manera individual.
Lo que más me aleja de Nightreign no es su dificultad, ni su ritmo, sino su falta de dirección, de visión. El juego va a mil por hora, tus compañeros salen corriendo ni bien empieza la partida porque el círculo nos va comiendo; no llegás a apreciar el entorno, ni a estudiar del todo el escenario o tus enemigos. Todo es demasiado fugaz como para dejar una impresión duradera.
No todo es negativo, eso está claro. Cuando la run se alinea, cuando llegás al jefe final de una expedición, cuando sabés contra qué te vas a enfrentar y podés prepararte, el juego revive. Ahí está la chispa de From. Los jefes finales sí están a la altura de lo que esperamos. Son memorables, espectaculares, con mecánicas interesantes y el hecho de ir repitiéndolos hace que los podamos ir estudiando hasta vencerlos.
Otro punto a favor es el sistema de clases y builds. Nightreign te deja experimentar con armas y hechizos de forma mucho más accesible que en Elden Ring. Los personajes (Guardián, Salvaje, Pirata, etc.) están bien diferenciados, con habilidades únicas y combinaciones posibles muy bizarras ya que cualquiera puede usar cualquier tipo de equipamiento sin importar sus estadísticas (no hay peso máximo). Esto es quizás lo más divertido: hacer sinergia con otros, encontrar tu estilo, romper el sistema de maneras que antes llevarían demasiado tiempo para poder probar del todo.
Lamentablemente, todo lo demás se queda corto. Las herramientas de comunicación son pobres. El mapa no cambia demasiado entre expediciones (salvo cuando derrotamos a un jefe pero esos cambios son temporales). Hay secretos interesantes en el hub central del juego (La Mesa Redonda) y es donde más se puede evidenciar el estilo From Software; incluso podemos destrabar clases de personajes al cumplir ciertos objetivos. Esos detalles no son suficientes para justificar que regrese una y otra vez a una experiencia que me resulta bastante vacía.
En definitiva, para los que aman el PvP, el meta y todo lo que rodea simplemente al combate en los juegos de este estilo, Nightreign puede ser una experiencia relativamente divertida y una excusa para pulir sus habilidades. Para quienes buscábamos algo más artesanal, para quienes disfrutamos esa sensación de superación que te dan los souls y el diseño de niveles tan característico del estudio, este título es solo una sombra de lo que nos suelen ofrecer. Un producto que, sin ser del todo malo y hasta teniendo varias virtudes, parece hecho por la simple razón de que Elden Ring fue un tremendo éxito comercial y no por una auténtica curiosidad artística.

Elden Ring Nightreign
Desarrolla:
FromSoftware
Distribuye:
Bandai Namco Entertainment
Fecha de lanzamiento:
30 de mayo, 2025
Disponible en:
PlayStation4, PlayStation 5, PC, Xbox One, Xbox Series X, PC
Versión analizada:
PC
«Parece hecho por la simple razón de que Elden Ring fue un tremendo éxito comercial y no por una auténtica curiosidad artística.»