Astro Bot es la definición de una gema escondida. De tener un pichón de crack de las inferiores en el banco de suplentes. Su valor está más que demostrado ya desde su primera aventura en Astro Bot Rescue Mission y qué más podemos decir de Astro’s Playroom, que definitivamente es una de las mejores experiencias de Playstation en esta generación. Aún así, habiendo sido el primero un exclusivo de PSVR y el segundo condenado a ser definido por siempre como una “demo técnica”, el pequeño robot parecía no encontrar su oportunidad de lucirse. Cuatro años más tarde, Astro finalmente debuta en primera, dejando en claro que esta pulga digital puede hacerle levantar varias copas a Sony, si simplemente lo dejan jugar.
Astro Bot, el homónimo título nuevo de este personaje, es un juego que rompe una maldición que incontables indies padecieron y estudios Triple AAA directamente evitaron: lanzar un plataformero colectatón 3D, que estuviera a la altura de una experiencia de Nintendo. Si, las comparaciones son odiosas, pero hay que saber dar el crédito a quien lo merece. Sin embargo, donde los Super Lucky’s Tale y Yooka-Laylees fallaron, Astro Bot prospera y se sienta en la mesa de los grandes, sin reinventar la fórmula en absoluto, sino a base de una dirección definida, valores de producción a tope de gama y una presentación que desborda personalidad, evocando a los momentos más lúdicos y menos cinematográficos de Playstation.
Se van a cansar de escuchar que este juego “es una carta de amor al gaming”. Y mientras que las inspiraciones y referencias a los popes del género son claras, Astro Bot es una vez más una oda a Playstation. Es verdad que por momentos roza la propaganda institucional y hasta se puede escuchar al CEO de Sony preguntando si se pueden agregar más triángulos, cuadrados, círculos y equis, pero realmente se siente como una celebración a los treinta años de historia de quien saber ser una de las compañías más importantes en la historia de los videojuegos. Lo más interesante de todo esto, es que no se limita a celebrar solo su historia reciente, sino que se dedica activamente a conmemorar más de una experiencia de las que conocimos cuando los juegos costaban cinco pesos.
El llamado a la aventura nos pone una vez más en el chasis de Astro, perdido en una galaxia desconocida luego de que su nave en forma de Play 5 se estrellará en un extraño planeta, tras ser atacados por unos marcianos verdes en platos voladores. Nuestra misión será rescatar a los 300 robots de nuestra tripulación, entre los cuales se destacan muchos que representan a icónicos personajes de la compañía como también una gran cantidad que por más que en el imaginario colectivo hoy se los considere multiplataforma, en algún momento saltaron a la fama gracias a las consolas de Sony.
Siguiendo el casi reglamentario esquema del género de tener que encontrar una cierta cantidad de estos personajes para destrabar los siguientes niveles, avanzamos sobre una serie de escenarios con un excelente diseño de nivel, los cuales no solo rara vez se parecen entre sí, sino que además van sumando distintos ítems que nos ayudan a atravesarlos. Esto logra que los niveles donde simplemente debemos limitarnos a avanzar con las habilidades básicas del personaje, sean los menos. Mejor aún, por momentos los bots especiales nos prestarán las habilidades de los protagonistas de los juegos homenajeados y podremos ser un diminuto Kratos robótico temporalmente, entre otros personajes que datan de eras de muchos menos polígonos.
Hay algo muy inteligente en el diseño de niveles de Astro Bot. La primera vez que los pasamos parecen extensos y complejos. Sin embargo, si regresamos para completarlos al cien por ciento – porque tal vez solo nos faltaba un ítem por recolectar la primera vez -, e incluso utilizamos la asistencia para encontrarlo que se ofrece a partir de la segunda vuelta, nos damos cuenta que son unas maquetas muy compactas y artesanalmente diseñadas. Esto no solo demuestra lo bien que funcionan para un juego de plataformas, sino el potencial que tienen para la escena del speedrunning, al punto que me sorprendió que no incluyera algún tipo de modo Time Trial aún después de terminar el juego. Es verdad que esto luego puede agregarse con las tarjetas de actividades de PS5, pero no hubiera estado nada mal que viniera incluido.
Porque Astro Bot no solo busca nuestras risas, sino que tiene su costado desafiante. En otra acertada decisión, mientras que los niveles principales pueden ser atravesados incluso por jugadores principiantes eventualmente, a medida que avanzamos van apareciendo niveles extra que explícitamente son desafíos plataformeros o de combate, los cuales requieren un nivel de habilidad mucho mayor. El hecho de estar separados de los niveles obligatorios a atravesar, logran que la experiencia pueda sentirse fluida para todo tipo de jugadores y jugadoras, pudiendo luego atacar los niveles más desafiantes cuando se sientan en condiciones. Sumado a esto, muchos de los niveles especiales están escondidos en el juego, por lo que tener que encontrarlos agrega todavía una capa más a este pequeño gran juego.
Teniendo en cuenta ciertas similitudes de locación y algunas de gameplay que definitivamente tomó como inspiración u homenajes pero de ninguna manera malintencionadas, por momentos sentía que estaba jugando un hipotético Mario Galaxy 3. Esto lo digo claramente como un halago, pero también para traer a Nintendo a colación una vez más, porque hay algo en lo que que Astro Bot logra sacarle un par de vueltas. En general, casi la totalidad de los enemigos de este juego son tan poco inspirados como impactante es el resto de la presentación, pero los jefes que tenemos que derrotar para obtener las piezas necesarias y así reparar nuestra nave, son de lo más memorable de esta experiencia.
Ya sea por sus mecánicas, su diseño, la variedad de sus etapas o el nivel de desafío, los jefes de nivel son uno de los principales motivos por los cuales seguimos avanzando. De esos que cuando hasta nos ponemos un poco contentos cuando perdemos porque más que frustrarnos, nos divierte arrancarlo de nuevo. Algunos serán una arena de combate, otros toda una secuencia en movimiento. Todos nos van a superar en tamaño y mientras que ninguno es un jefe de Elden Ring, todos nos van a dar algún motivo para transpirar las manos al menos en una de sus etapas. Ya sea que nos otorguen alguna habilidad especial para enfrentarlos o debamos hacerlo a puño limpio, no hay un jefe que parezca una idea a medio cocinar. Si jugaron los títulos anteriores saben que esto no es una novedad, pero vale la pena destacar ya que es algo en lo que Astro Bot puede y tal vez debe seguir profundizando, hasta transformarlo en una marca registrada de su identidad.
Logrando convertirse en uno de los mejores lanzamientos de PlayStation por segunda vez en una misma generación, hay un comentario para hacer en como el juego que termina siendo y todas las experiencias que homenajea, son lo que justamente supo hacer grande a una consola que luego fue encasillandose en un tipo muy específico de géneros. Pero tampoco hay que irse por las ramas y tal vez simplemente aplaudir el trabajo de Team Asobi, que por tercera vez consecutiva desarrolla un juego que ya debería pasar a ser insignia para Sony. También hay otro comentario para hacer en que esto venga de uno de los ínfimos estudios japoneses que conservaron, pero una vez más eso no es lo que hoy nos convoca.

Lo que me cuesta un poco más dejar pasar es como todo lo que la completa utilización de las prestaciones del Dual Sense complementan la inmersión y diversión del juego. Literalmente ponen en nuestras manos uno de los mayores avances en el gaming en los últimos años, pero parece que solo podemos disfrutarlo cada cuatro años. Amé cada vez que sentía que caminaba sobre una superficie diferente y que tenía que ejercer fuerza para realizar una acción. Quisiera un juego entero con solo niveles de hielo por cómo se siente cuando patinamos o caminamos bajo la lluvia. Esto, termina siendo un gran recordatorio de una promesa no cumplida, pero al final del día simplemente eleva a Astro aún más.
Astro Bot es una experiencia imprescindible para los usuarios de PS5, entregando diversión para toda la familia y siendo un espectáculo tanto para nuevos jugadores y jugadoras como para veteranos de la industria. Sus valores de producción, diseño de niveles y espíritu celebrativo, son testimonio de lo mejor que el gaming y PlayStation tienen para darnos.
Todavía veo un espacio para mejorar, principalmente otorgando un mayor nivel de control sobre el personaje, el cual puede sentirse medio rígido o pesado y enredarse entre la cámara y las perspectivas, haciendo lanzarnos a muchos saltos de manera imprecisa. También debo señalar que la banda sonora original vuelve a ser muy buena, pero da la sensación que al ser un juego más extenso, se repite con mayor frecuencia, lo que se puede multiplicar exponencialmente si buscamos terminar el juego al cien por ciento como lo hice no solo para este análisis, sino por sentirme completamente atrapado por el mismo. Pero si dejo estás menciones para este momento, es porque al final de cuentas, no llegan a intervenir con nuestra diversión en un juego que no voy a parar de recomendar. Todos vamos a estar expectantes de la próxima gran producción de acción en tercera persona con tintes cinematográficos de Play, pero no dejemos de recordarles que definitivamente, también es por acá.

ASTRO BOT
Desarrolla:
Team Asobi
Distribuye:
Sony Interactive Entertainment
Fecha de lanzamiento:
6 de septiembre, 2024
Disponible en:
PlayStation 5
Versión analizada:
PlayStation 5
«Astro Bot es una experiencia imprescindible para los usuarios de PS5, entregando diversión para toda la familia y siendo un espectáculo tanto para nuevos jugadores y jugadoras como para veteranos de la industria.»